Foto: lifeglobe.net

El británico Stephen Wiltshire es un autista con síndrome del sabio, quien posee una gran memoria visual que le da la oportunidad de recordar ciudades completas. No obstante, la fama de este individuo radica en sus cualidades artísticas. Desde niño se dedicaba a pintar y, como no habló hasta los 9 años de edad, la pintura fue su herramienta de comunicación. En un principio dibujaba árboles, luego autos y, después, edificios, lo que se transformaría en su gran pasión.

El londinense, de 40 años, ha mezclado el arte y la memoria visual para ser considerado un artista de prestigio. Tiene la capacidad de reproducir panoráminas de una urbe son solo mirarlas por 20 minutos. Su última obra la llevó a cabo en Singapur. Para esto, tuvo que dar un paseo de menos de una hora en helicóptero con su inseparable hermana Annete.

Luego, se instaló con su material de dibujo en un centro comercial de la transitada avenida Orchard, donde exponía 18 de sus obras. En este sitio, reprodujo fiel y minuciosamente la bahía de Singapur. Con un rotulador Staedler color negro, ubicado en un taburete y oyendo su música favorita mediante los cascos, Wiltshire pasaba 7 horas diarias, donde solamente realizaba una pausa de 50 minutos para alimentarse.

Sus increíbles trabajos panorámicos han recorrido el mundo. Nueva York, San Francisco, Roma, París, Madrid y Tokio son algunas de las ciudades que ha retratado.

La similitud arquitectónica del trabajo del artista es una sorpresa para todo el mundo. Tanto es así que, desde hace varios años, este es un caso de estudio del neurólogo Olivier Sacks. El especialista destaca la capacidad de Wiltshire para reproducir con exactitud los edificios que recuerda.

Su labor tuvo un gran reconocimiento en 2006, cuando el príncipe Carlos de Inglaterra le otorgó la condecoración de Miembro de la Orden del Imperio Británico.

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